Personas amparadas en la oscuridad hicieron volar una reja, violentaron una ventana de la capilla para robar 1 consola de sonido, 2 garrafas y 10 sillas plásticas. Inmediatamente la fuerza abrió una investigación.
El hecho ocurrió esta madrugada, y se especula que serían dos o más personas que habrían actuado de forma conjunta con apoyo de algún tipo de vehículo para retirar los elementos del lugar. Lo raro de todo esto es que ningún vecino haya advertido lo que pasó.
La Capilla del barrio, fue objeto de destrozos causados por personas sin escrúpulos que arrancaron la reja de protección, para luego destrozar una ventana ubicada en el lateral izquierdo del edificio, que se comunica con el exterior, con la canchita de fútbol y con la vía pública, sector al que cualquiera puede acceder; y sin dudas que estas personas lo hicieron con saña.
Una vez en el interior, los maleantes revolvieron todos los armarios buscando cosas de valor, se hicieron de 1 consola de sonido de seis entradas, de 60×30 cm de alto y ancho, color negra que se utiliza para la misa, 1 pila de 10 sillas plásticas de color blanca, y 2 garrafas (una color verde, la otra gris) de 10 kg cada una.
Con las primeras luces del día, el sereno de la residencia juvenil que se halla en las inmediaciones del mismo terreno, alertó a integrantes de la comisión lo que había pasado, quienes convocaron a la Policía y paralelamente realizaron la denuncia en la comisaría.
Los denunciantes lamentaron esta situación, “esto causa impotencia, tanto cuesta conseguir, haciendo rifas, comidas para reunir fondos y mejorar la capilla, y estas personas inescrupulosas causan un gran perjuicio a esta comunidad católica” expresaron indignadas por lo ocurrido.
